Son las ganas locas de gritar,
Lo que oculta este torrente rojo sobre mi piel.
Es el oscuro temblar de mis venas,
Los que huyen del fuego eterno.
No tengo donde esconderme,
No tengo donde esconderme,
se marcharon las ganas de gritar,
Todos están presentes,
En este mi último final.
La luz que un día conquisto lo oscuro,
La luz que un día conquisto lo oscuro,
Se vuelve roja entre mis labios.
La confusión existe dentro de mí,
La confusión existe dentro de mí,
No sé si es pasión o muerte,
Día o noche,Desierto o… manantial…
Se oye de regreso el grito...
Vuelvo a gritar!
No hay comentarios:
Publicar un comentario